lunes, 27 de enero de 2014

“Un Día en Casa MANU es un Día de Milagros en Acción”

Entrevista a Silvia Casas, directora de la ONG Casa MANU


“Manu llegó una tarde soleada de julio. Lo recibí en la vereda de mi casa, envuelto en una manta celeste y con apenas 22 días. Lo vi como un pequeño cachorro humano muy vulnerable. En ese encuentro no sentí que su presencia cambiaría la vida de tantas personas… y la mía en particular.”
Si estas palabras calan en lo más profundo, la historia de quien las pronuncia, mucho más. Se trata de Silvia: Una mujer con una fortaleza y un bagaje de experiencias que es inspiración pura. 
Casa MANU – Mucho Amor Nos Une - es más que un simple lugar de paso para los niños con VIH/SIDA. En términos de Silvia Casas, fundadora y directora de la asociación, se trata de una “familia argentina con 19 chicos”. 

El nombre de esta ONG no fue elegido al azar. Remite a Emanuel, una persona muy especial para Silvia. Es su hijo del corazón, portador de VIH, que pese a sus cortos 8 años de vida alcanzó lo que no todos logran: transformar a quienes lo conocieron. 

Mirando en perspectiva, ¿cómo percibís el correlato que existe entre tus experiencias de vida y la posterior creación de Casa MANU?
Mi experiencia de vida creció con la experiencia de vida de él. Hoy, 15 años después de su muerte, sé que vino a nosotros para dejar este mensaje, para que plasmemos esta obra. Nada de esto sería posible si no hubiera tenido a Manu en mis brazos, expresa Silvia, quien hace 11 años está al frente de esta causa. 

Al redefinirse la familia por la llegada de Manu, ¿cómo describirías el vínculo que se generó entre ustedes? 
Manu nos ayudó a superar el temor a lo desconocido, a generar espacios de encuentro y a entender una paradoja: tener a él con nosotros, saber que era sólo un préstamo y, a pesar de todo, vivir siempre en un estado de felicidad plena.

¿Cómo es la cotidianeidad, el día a día en la convivencia de esta gran familia que es Casa MANU? 
Un día  en Casa MANU es un día de milagros en acción, como decía la Madre Teresa de Calcuta. Es la cotidianeidad de llevar adelante una casa con 19 niños/as con diferentes particularidades, pero unidos por la situación de abandono social. Son hermanos, pichones heridos que se necesitan y nos necesitan. 
“Hay algo común en las historias -cuenta Silvia-. Cuando los chicos llegan al hogar, los primeros días pasan por el baño sin mirarse al espejo, no se reconocen, no están, no existen ni para ellos mismos. Cuando vemos que empiezan a peinarse frente al espejo decimos: Ya está, empezó nuestra tarea”.

El relato anterior expresa con claridad la lucha emprendida por la asociación para lograr la integración de los niños. En relación a esto, Silvia nos cuenta: “La sociedad ha cambiado su mirada respecto al VIH, pero los niños/as siguen siendo la gran deuda. Hay pocos programas de ayuda destinados a la incidencia del VIH pediátrico. Aún falta comprender que estos chicos crecerán, estudiarán, trabajarán, amarán y serán amados. El SIDA ya no es sinónimo de muerte. La sociedad tiene que estar dispuesta a integrarlos y brindarles el lugar que les corresponde“.

Porque, como dice Silvia, “las cadenas solidarias se construyen con la sumatoria de eslabones”, te acercamos la siguiente información de utilidad: 
  • ¿Cómo puedo colaborar?

Acercando donaciones (alimentos frescos y no perecederos, pañales).
Involucrándome en el programa de voluntariado y/o padrinazgo.
Asociándome con una  cuota mensual.
  • ¿Cómo me contacto?

Dirección: Weiman 670 (Monte Grande - Buenos Aires)
Teléfono: 011- 4281-1116 
E-mail: informes@casamanu.org.ar
Más información en: http://www.casamanu.org.ar/


Esto es MANU. 
Que Mucho Amor Nos Una, siempre. 


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