Justina Lo Cane padecía cardiopatía congénita desde el año y
medio de vida. Se mantuvo bajo tratamiento hasta los 12 años, cuando su
situación empeoró y la tuvieron que internar en la Fundación Favaloro.
Necesitaba un trasplante de corazón urgente y sus padres la anotaron en la
lista de espera del INCUCAI. Casi tres meses después de su internación, el 22
de noviembre pasado, finalmente falleció porque el corazón que esperaba nunca
llegó…
A raíz de este caso tan triste, el 27 de junio de este año
se aprobó el proyecto de la nueva Ley Justina, la cual modifica e incorpora
algunos puntos importantes dentro de la antigua Ley de Trasplante de Órganos,
Tejidos y Células. Por ejemplo:
* Podrá realizarse la ablación de órganos a toda persona
mayor de 18 años que no haya dejado constancia expresa en vida de su oposición.
* Se creará el Servicio de Procuración en los hospitales
públicos y privados para poder brindarles una adecuada atención a las familias
de los donantes además de darles toda la información sobre el tema y de
garantizar el proceso de donación.
* Se incorporará la donación renal cruzada con donante vivo
y para su realización ya no se necesitará la autorización de un juez.
También se suma un capítulo aparte dentro de la Ley dedicado
a los medios de comunicación, para que aborden el tema de la donación de
órganos con suma responsabilidad y cuidado.
En Argentina hay casi 7.800 personas en lista de espera y
todavía se encuentra muy lejos de ser un país líder como España, en donde hay
cuarenta donantes por millón de habitantes.
¡Desde Proyecto Pura Vida celebramos emocionados que un
cambio así haya sucedido!
Cuenta su papá que Justina quería ser famosa y que todo el
mundo la conociera…vaya si lo logró...a través de esta Ley tan importante para
muchísima gente su nombre jamás será olvidado y quedará en nuestros corazones
para siempre.
Por Virginia Cattaneo para Proyecto Pura Vida
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