22 de marzo: Día Mundial del Agua
“De agua somos. Del agua broto la vida. Los ríos son la sangre que nutre la tierra, y están hechas de agua las células que nos piensan, las lagrimas que nos llora y la memoria que nos recuerda. E. Galeano.
De agua somos. A lo largo de la historia, cada población ha
cambiado su forma de vincularse con el agua. En muchas tradiciones antiguas,
sus poblaciones han forjaron una relación de sustentabilidad y respeto,
considerándola como fuente de vida y abundancia, o una divinidad
transformadora, base de reciprocidad y recreación social. En la cosmovisión
andina su origen proviene de Wirakocha, Dios creador del
universo, que fecunda a la Pachamama (madre tierra) y permite la
reproducción de la vida en la tierra.
El agua es un elemento imprescindible para el desarrollo de
la vida en el planeta. En 1992 la Organización de las Naciones Unidas (ONU)
declaró el 22 de marzo el Día Mundial del Agua, con el fin de concientizar
sobre la importancia de preservar nuestros recursos hídricos, como requisito
indispensable para lograr el Desarrollo Sostenible.
Una de las inquietudes centrales que ha ocupado a las
Naciones Unidas está relacionada con el cuidado y preservación del agua dulce.
El acceso al agua limpia, el saneamiento y la higiene son considerados
elementos fundamentales para la salud, la educación, la nutrición y la igualdad
de género. Se estima que más de un tercio de la población no tiene acceso al
agua potable. Los más afectados son aquellos con escasos recursos económicos,
las mujeres y los niños que habitan en lugares donde el acceso al agua limpia
es un verdadero lujo. La Asamblea General de las Naciones Unidas, ante esta
situación, reconoció en 2010 al agua como un Derecho Humano, reafirmando que el
acceso al agua potable y el saneamiento seguro son esenciales para la
realización de todos los derechos humanos. La Agenda 2030 para el Desarrollo
Sostenible (ONU) establece como objetivo sexto: agua limpia y saneamiento, con
el fin de lograr el acceso universal y equitativo al agua potable. Todo ello
reafirma que las medidas hídricas y de saneamiento son clave en la reducción de
la pobreza, el crecimiento económico y la sostenibilidad ambiental.
El Día Mundial del Agua es una fecha oportuna para que
todos, de forma individual o colectiva comencemos a cuidar y valorar el agua
que utilizamos en nuestras múltiples actividades diarias. Para eso, existen
acciones claves que podemos adoptar en nuestra vida cotidiana para cuidar el
agua:
- Tomar duchas de 5 minutos.
- Cuando abras la ducha, recoge el agua fría que corre mientras esperas que ésta se caliente.
- Reutilizar el agua de lluvia.
- Regar las plantas y jardines en la noche. Así, evitas perdidas por evaporación.
- Cerrar la llave de agua mientras te lavas los dientes, te aseas o te afeitas (podes ahorrar hasta 10 litros de agua).
Es mucho lo que podemos hacer desde nuestro lugar, para ser
guardianes y protectores del agua.
Por Paula Lucero para Proyecto Pura Vida
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