Día Mundial de la Energía
Una de las grandes fuentes de contaminación ambiental está
relacionada con la generación de energía mediante el uso de fuentes no
renovables, como gas, carbón y petróleo.
El 14 de febrero se celebra el Día Mundial de la Energía, con el fin de
concientizar acerca de la importancia que tiene el consumo responsable e
informar sobre la existencia de diferentes tipos de energías.
Una fuente de energía limpia e inagotable es mejor conocida
como “renovable”. Su ventaja principal impacta directamente en el cuidado del
medioambiente: este tipo de energías no produce gases de efecto invernadero, y
éstos, son los causantes del cambio climático. El frío en el verano, el calor
en el invierno o los cambios bruscos de estaciones, son consecuencia de estos
gases que producen las energías que utilizamos.
Dentro de las fuentes renovables más conocidas se encuentran
la energía solar, la eólica y el biogás. A la vez, este tipo de fuentes son más
potenciales a poder utilizarse en un hogar. La energía solar es la que,
mediante conversión a calor o electricidad, se aprovecha de la radiación
proveniente del sol, como los paneles solares. La eólica hace referencia a las
tecnologías que aprovechan el viento, como un molino por ejemplo. El biogas, se
forma a partir de la descomposción de materia orgánica, y se puede generar
combustible o electricidad.
Surge el interrogante de ¿Por qué seguimos utilizando
fuentes no renovables en casi la totalidad de nuestro consumo diario? En primer lugar, el costo sigue siendo menor
y son mucho más accesibles. En segundo lugar, todavía no existe la forma de
conservar energía renovable para utilizarla en otro momento. Si el sol no sale,
nuestros paneles solares no funcionarían.
Sin embargo, científicos e ingenieros trabajan para lograr
que se genere un mayor aprovechamiento de las energías renovables, y avanzan
cada año para poder generar mayor accesibilidad a ellas. Además, si bien el
precio de compra e instalación es mayor, posteriormente el coste es casi nulo.
Los humanos estamos acostumbrados a utilizar de manera
indiscriminada fuentes de energía que no sólo no son inagotables, sino que
además impactan de manera negativa en el medioambiente. Parece difícil imaginar
nuestros hogares adaptados a este tipo de tecnologías, aunque no caben dudas
que será el futuro. Mientras tanto, nuestra responsabilidad será cuidar de la
mejor manera posible el uso de las fuentes de energía que tenemos:
- Los aires acondicionados a temperaturas promedio (24°)
- Apagar las luces que no se utilizan
- No dejar dispositivos enchufados más de lo debido
- Utilizar lámparas led en preferencia de las comunes.
El cuidado del gas y la utilización del agua
también forman parte del consumo consciente que se requiere.
El cuidado responsable de la energía permitirá disminuir ese
impacto negativo, abaratar los costos de luz, gas y agua que abonamos, y
adquirir el hábito de realizar un consumo responsable en nuestra vida
cotidiana. En un futuro, si este cambio de hábitos es potenciado junto al uso
de energías renovables, será posible la idea de pensar un consumo energético
que sea inofensivo para el planeta.
Por Nati Stanchi para Proyecto Pura Vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario